Esponja konjac Carbón de bambú
Hecha a partir de las fibras vegetales de las raíces de la planta Asiática Konjac (Amorphophallus konjac). El Carbón de Bambú tiene la capacidad de absorber toxinas, impurez
[...]
Hecha a partir de las fibras vegetales de las raíces de la planta Asiática Konjac (Amorphophallus konjac).
El Carbón de Bambú tiene la capacidad de absorber toxinas, impurezas y otras sustancias dañinas para la piel, ejerciendo así una acción detoxificante. Es ideal para pieles jóvenes con acné o piel grasa, ya que limpia suavemente la piel absorbiendo la suciedad, eliminando también los puntos negros. Aporta un suave efecto exfoliante que elimina las células muertas, dejando la piel purificada y limpia sin alterar su pH natural.
Propiedades de la esponja de limpieza facial y corporal
- Permite limpiar la piel SIN necesidad de jabón.
- Exfolia y masajea suavemente la piel sin dañar su capa protectora.
- Elimina células muertas.
- Neutraliza los ácidos de la piel, como la suciedad y el sebo.
- Regula el pH natural cutáneo.
- Purifica la piel, elimina puntos negros y aporta un efecto peeling calmante.
- Hidrata el rostro de forma natural.
Consejos de uso detox para tu piel y cuerpo
- Puedes utilizar la esponja Konjac con la frecuencia que quieras, se recomienda usarla a diario.
- Humedece la esponja hasta que se empape con agua templada y se reblandezca.
- Pasa la esponja por todo el rostro, bien con agua o con tu agua micelar si quieres eliminar también restos de maquillaje.
- Masajea el rostro o el cuerpo con ligeros movimientos circulares, de esta forma eliminas las pieles muertas y realizas una limpieza profunda de la piel.
- Una vez hayas terminado de utilizar, enjuagar y escurrir la esponja, mantenla guardada en un lugar seco y bien ventilada.
- Si no vas a usar tu esponja durante un largo tiempo, guárdala en la nevera.
- Debes reemplazar tu esponja por una nueva cada 3 meses para un uso óptimo.